Mientras en los Estados Unidos permiten la muerte de personas indocumentadas aquí, en República Dominicana, no lo hacemos. Y, si lo hiciéramos, ya tu sabes

El imperialismo norteamericano y los países imperialistas y recolonizadores de la Unión Europea están financiando campañas de descrédito en contra de nuestro país. Según ellos, nosotros, los dominicanos, discriminamos a los haitianos.

Sin embargo, son esos países lo que, de solidaridad, no tienen nada. Sólo les interesa “solidarizarse” con todo aquello donde ellos puedan extraer plusvalía y riquezas a costa del exterminio y el saqueo de los países del Tercer Mundo y de los trabajadores en general.

Mientras en los Estados Unidos permiten la muerte de personas indocumentadas (situación que aquí, en República Dominicana, no lo hacemos; y si lo hiciéramos, ya tu sabes) que están de manera ilegal en sus territorios; y promueven una cacería, como si fueran animales, en contra de dichos inmigrantes; aquí, en República Dominicana, tienen ONGs, pagadas y financiadas por ellos, encargadas y asignadas para denunciar a nivel internacional, para desacreditarlos y destruir su reputación, a los hospitales que le nieguen asistencia de salud a los invasores haitianos; lo cual es un evidente chantaje.

El hecho de que en los países imperialistas no se les dé asistencia a las personas que carecen de recursos o son indocumentado es la verdadera naturaleza, rapaz y movida sólo por el lucro, del capitalismo y de los monopolios, como lo viene a corroborar el siguiente reporte:

Muere mexicano tras rechazo de hospital por ser indocumentado

Según su familia, después de permanecer 20 días internado, el hospital le negó continuar con el cuidado médico al carecer de seguro médico y estatus migratorio en el país

Chicago 13 jul (EFEUSA)- Un inmigrante indocumentado que sufrió un derrame cerebral en abril falleció este fin de semana en un asilo de Elgin, al Oeste de Chicago, tras ser desalojado de un hospital por “no tener papeles ni seguro médico”, informó hoy su familia.
El mexicano Adrián Lagunés, de 62 años, originario de Yecuatla, en el norte Veracruz, murió en un asilo de dicho poblado, en el norte de Illinois.

Lagunés, quien trabajaba en una fábrica, sufrió el pasado 29 de abril un derrame cerebral en su vivienda y fue de inmediato internado en el Hospital Advocate Sherman.

Según su familia, después de permanecer 20 días internado, el hospital le negó continuar con el cuidado médico al carecer de seguro médico y estatus migratorio en el país.

Su hermana Teresa Lagunés dijo a Efe que la familia hizo todo lo posible para que no lo desalojaran del hospital.

“Nosotros hablamos con el hospital para que se quedara más tiempo, pero nos dijeron que eran las reglas y que no se podía quedar más; nos dijeron que porque era indocumentado no podían tenerlo ahí”, aseguró.

La familia precisó que el apartamento donde viven era inadecuado para instalar las máquinas que le ayudaban a respirar y por eso fue internado en un asilo.

Entre tanto, el hospital no quiso comentar sobre cuestiones “específicas” del caso argumentando “privacidad”.

“Nuestros pensamientos y oraciones están con la familia Lagunés en este difícil tiempo”, aseguró en una declaración a Efe Tonya Lucchetti-Hudson, directora de Asuntos Públicos del Advocate Sherman Hospital.

Jesús Vargas, miembro del grupo Coalición Humanitaria Internacional Pro Inmigrante (CHIP), dijo a Efe que este caso recuerda al de Quelino Ojeda Jiménez, quien en 2010 fue repatriado médicamente a Oaxaca, México.

Ojeda Jiménez, un parapléjico a causa de un accidente de trabajo, había sido internado en un hospital Oak Lawn, un suburbio de Chicago, cuando le rehusaron más tratamiento y fue transportado por aire a México.

El enfermo falleció un año después de un paro cardiaco y su muerte causó indignación en la comunidad hispana.

“Lagunés, al igual que Quelino Ojeda Jiménez fallece por no tener papeles ni seguro médico”, cuestionó Vargas.